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Me he encontrado con este artículo, y como tengo una especial debilidad por Longines, como marca relojera, os lo transcribo aquí.
Coleccion Heritage de LONGINES cronógrafo rueda de pilares
Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronographs (Cronógrafos de Rueda de Pilares).
Con un movimiento mecánico inédito para el cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares desarrollado exclusivamente por ETA (la firma más prestigiosa de fabricación de mecanismos de relojería) para Longines, este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de Longines con el cronometraje y el mundo del deporte.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
En consecuencia, en Longines el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel de dispositivo técnico tradicional y auténtico y los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
En el calibre referenciado L688.2 puede verse la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera, la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, y las modificaciones progresivas de las preferencias del público, que han llevado a los cronógrafos mecánicos y los relojeros tradicionales a una popularidad creciente.
Provisto de 27 rubíes, el calibre L688.2 presenta una carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
Laurent Lamotte, Regional Brand Manager de Longines sostuvo durante la presentación “Longines refuerza su presencia dentro del selectísimo grupo de marcas relojeras de tradición ofreciendo un cronógrafo Column Wheel”.
- Longines Column Wheel, diseñado con el exclusivo calibre L688, presenta Caja de acero y correa de cuero marrón con cierre desplegable, cronógrafo con calendario ubicado entre las 4 y las 5, cuadrante silver y tapa trasera de cristal de zafiro para visualizar el movimiento y la rueda de pilares (column wheel).
Acerca de Longines
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 178 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Contacto de Prensa: DOT Communications
Coleccion Heritage de LONGINES cronógrafo rueda de pilares
Buenos Aires, 18 de octubre de 2011.Después de haber presentado en 2009 un reloj que encierra un movimiento-cronógrafo automático exclusivo provisto de una rueda de pilares que controla las funciones del dispositivo de medida de los intervalos de tiempo, Longines imaginó nuevas declinaciones para este calibre excepcional y hoy lo presenta en nuestro país.
Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronographs (Cronógrafos de Rueda de Pilares).
Con un movimiento mecánico inédito para el cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares desarrollado exclusivamente por ETA (la firma más prestigiosa de fabricación de mecanismos de relojería) para Longines, este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de Longines con el cronometraje y el mundo del deporte.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
En consecuencia, en Longines el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel de dispositivo técnico tradicional y auténtico y los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
En el calibre referenciado L688.2 puede verse la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera, la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, y las modificaciones progresivas de las preferencias del público, que han llevado a los cronógrafos mecánicos y los relojeros tradicionales a una popularidad creciente.
Provisto de 27 rubíes, el calibre L688.2 presenta una carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
Laurent Lamotte, Regional Brand Manager de Longines sostuvo durante la presentación “Longines refuerza su presencia dentro del selectísimo grupo de marcas relojeras de tradición ofreciendo un cronógrafo Column Wheel”.
- Longines Column Wheel, diseñado con el exclusivo calibre L688, presenta Caja de acero y correa de cuero marrón con cierre desplegable, cronógrafo con calendario ubicado entre las 4 y las 5, cuadrante silver y tapa trasera de cristal de zafiro para visualizar el movimiento y la rueda de pilares (column wheel).
Acerca de Longines
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 178 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Contacto de Prensa: DOT Communications
Román Reynoso
La reseña de Relojes de Luxe
http://relojesdeluxe.com/2011/06/02/longines-column-wheel-chronograph
Otro articulo relacionado, de PRESSBRAND
Longines.Column-Wheel Chronograph
20/10/2011. The Longines Column-Wheel Chronograph
Después de haber presentado en 2009 un reloj que encierra un movimiento-cronógrafo automático exclusivo provisto de una rueda de pilares que controla las funciones del dispositivo de medida de los intervalos de tiempo, Longines ha imaginado nuevas declinaciones para este calibre excepcional. Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronograph.
Longines ha financiado y encomendado a la empresa ETA el desarrollo exclusivo de un movimiento mecánico inédito para cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares. Este calibre está referenciado L688.2. Inscribiéndose en la continuidad de la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, esta creación responde a las modificaciones progresivas de los gustos en materia de relojes, a la popularidad creciente de los cronógrafos mecánicos y a la fascinación del público para los dispositivos relojeros tradicionales. Los cronógrafos de rueda de pilares corresponden a esas tendencias y sensibilidades que han surgido en la escena relojera. Repuesto dentro del linaje de los instrumentos de medida del tiempo creados por Longines, este calibre constituye la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
Este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de la casa Longines con el cronometraje y el mundo del deporte. En consecuencia, el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel, en la casa Longines, de dispositivo técnico tradicional y auténtico. Los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
Provisto de 27 rubíes, el movimiento L688.2 es un calibre de carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares, con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema, y en particular la rueda de pilares que ha sido estudiada por los ingenieros de la empresa ETA, ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.733/749.4.52/72.x / L2.733.8.72.x)
Para un primer reloj The Longines Column-Wheel Chronograph otorga la primacía a una estética clásica y refinada. Acogiendo el calibre L688.2 en una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro, este cronógrafo indica la hora mediante agujas tipo dauphines rodiadas o rosas que recorren una esfera plateada o negra provista de 13 índices. Con una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas, este reloj, presentado con una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro, aloja un movimiento cuya rueda de pilares se revela a través de un fondo transparente de zafiro.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.742/750.4.56/76.x / L2.742.8.76.x)
Para el segundo reloj The Longines Column-Wheel Chronograph, Longines ha privilegiado las formas clásicas y elegantes que evocan los relojes que contribuyeron a su éxito en el transcurso del siglo XX. Ese reloj dispone de una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro para alojar el calibre L688.2, cuyos latidos íntimos se desvelan a través de un fondo transparente de zafiro. Dotado de agujas tipo “dauphines” rosas, mediando el paso del tiempo en una esfera plateada o negra adornada con 8 índices, The Longines Column-Wheel Chronograph ostenta una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas. Una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro complementa este cronógrafo de pulsera de última tecnología.
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 175 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Después de haber presentado en 2009 un reloj que encierra un movimiento-cronógrafo automático exclusivo provisto de una rueda de pilares que controla las funciones del dispositivo de medida de los intervalos de tiempo, Longines ha imaginado nuevas declinaciones para este calibre excepcional. Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronograph.
Longines ha financiado y encomendado a la empresa ETA el desarrollo exclusivo de un movimiento mecánico inédito para cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares. Este calibre está referenciado L688.2. Inscribiéndose en la continuidad de la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, esta creación responde a las modificaciones progresivas de los gustos en materia de relojes, a la popularidad creciente de los cronógrafos mecánicos y a la fascinación del público para los dispositivos relojeros tradicionales. Los cronógrafos de rueda de pilares corresponden a esas tendencias y sensibilidades que han surgido en la escena relojera. Repuesto dentro del linaje de los instrumentos de medida del tiempo creados por Longines, este calibre constituye la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
Este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de la casa Longines con el cronometraje y el mundo del deporte. En consecuencia, el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel, en la casa Longines, de dispositivo técnico tradicional y auténtico. Los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
Provisto de 27 rubíes, el movimiento L688.2 es un calibre de carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares, con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema, y en particular la rueda de pilares que ha sido estudiada por los ingenieros de la empresa ETA, ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.733/749.4.52/72.x / L2.733.8.72.x)
Para un primer reloj The Longines Column-Wheel Chronograph otorga la primacía a una estética clásica y refinada. Acogiendo el calibre L688.2 en una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro, este cronógrafo indica la hora mediante agujas tipo dauphines rodiadas o rosas que recorren una esfera plateada o negra provista de 13 índices. Con una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas, este reloj, presentado con una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro, aloja un movimiento cuya rueda de pilares se revela a través de un fondo transparente de zafiro.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.742/750.4.56/76.x / L2.742.8.76.x)
Para el segundo reloj The Longines Column-Wheel Chronograph, Longines ha privilegiado las formas clásicas y elegantes que evocan los relojes que contribuyeron a su éxito en el transcurso del siglo XX. Ese reloj dispone de una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro para alojar el calibre L688.2, cuyos latidos íntimos se desvelan a través de un fondo transparente de zafiro. Dotado de agujas tipo “dauphines” rosas, mediando el paso del tiempo en una esfera plateada o negra adornada con 8 índices, The Longines Column-Wheel Chronograph ostenta una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas. Una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro complementa este cronógrafo de pulsera de última tecnología.
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 175 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Especificaciones técnicas calibres Longines:
http://www.longines.es/documents/technical-information/mechanical-movements-en.pdf
La reseña de Relojes de Luxe
http://relojesdeluxe.com/2011/06/02/longines-column-wheel-chronograph
Otro articulo relacionado, de PRESSBRAND
Longines.Column-Wheel Chronograph
20/10/2011. The Longines Column-Wheel Chronograph
Después de haber presentado en 2009 un reloj que encierra un movimiento-cronógrafo automático exclusivo provisto de una rueda de pilares que controla las funciones del dispositivo de medida de los intervalos de tiempo, Longines ha imaginado nuevas declinaciones para este calibre excepcional. Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronograph.
Longines ha financiado y encomendado a la empresa ETA el desarrollo exclusivo de un movimiento mecánico inédito para cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares. Este calibre está referenciado L688.2. Inscribiéndose en la continuidad de la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, esta creación responde a las modificaciones progresivas de los gustos en materia de relojes, a la popularidad creciente de los cronógrafos mecánicos y a la fascinación del público para los dispositivos relojeros tradicionales. Los cronógrafos de rueda de pilares corresponden a esas tendencias y sensibilidades que han surgido en la escena relojera. Repuesto dentro del linaje de los instrumentos de medida del tiempo creados por Longines, este calibre constituye la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
Este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de la casa Longines con el cronometraje y el mundo del deporte. En consecuencia, el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel, en la casa Longines, de dispositivo técnico tradicional y auténtico. Los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
Provisto de 27 rubíes, el movimiento L688.2 es un calibre de carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares, con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema, y en particular la rueda de pilares que ha sido estudiada por los ingenieros de la empresa ETA, ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.733/749.4.52/72.x / L2.733.8.72.x)
Para un primer reloj The Longines Column-Wheel Chronograph otorga la primacía a una estética clásica y refinada. Acogiendo el calibre L688.2 en una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro, este cronógrafo indica la hora mediante agujas tipo dauphines rodiadas o rosas que recorren una esfera plateada o negra provista de 13 índices. Con una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas, este reloj, presentado con una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro, aloja un movimiento cuya rueda de pilares se revela a través de un fondo transparente de zafiro.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.742/750.4.56/76.x / L2.742.8.76.x)
Para el segundo reloj The Longines Column-Wheel Chronograph, Longines ha privilegiado las formas clásicas y elegantes que evocan los relojes que contribuyeron a su éxito en el transcurso del siglo XX. Ese reloj dispone de una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro para alojar el calibre L688.2, cuyos latidos íntimos se desvelan a través de un fondo transparente de zafiro. Dotado de agujas tipo “dauphines” rosas, mediando el paso del tiempo en una esfera plateada o negra adornada con 8 índices, The Longines Column-Wheel Chronograph ostenta una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas. Una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro complementa este cronógrafo de pulsera de última tecnología.
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 175 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Después de haber presentado en 2009 un reloj que encierra un movimiento-cronógrafo automático exclusivo provisto de una rueda de pilares que controla las funciones del dispositivo de medida de los intervalos de tiempo, Longines ha imaginado nuevas declinaciones para este calibre excepcional. Actualizando los equipos de medida del tiempo desarrollados por Longines en el transcurso de su historia y ofreciendo una comodidad de utilización incomparable, estos relojes han sido bautizados The Longines Column-Wheel Chronograph.
Longines ha financiado y encomendado a la empresa ETA el desarrollo exclusivo de un movimiento mecánico inédito para cronógrafo de pulsera provisto de una rueda de pilares. Este calibre está referenciado L688.2. Inscribiéndose en la continuidad de la revalorización del universo del reloj mecánico emprendida a principios del siglo XXI, esta creación responde a las modificaciones progresivas de los gustos en materia de relojes, a la popularidad creciente de los cronógrafos mecánicos y a la fascinación del público para los dispositivos relojeros tradicionales. Los cronógrafos de rueda de pilares corresponden a esas tendencias y sensibilidades que han surgido en la escena relojera. Repuesto dentro del linaje de los instrumentos de medida del tiempo creados por Longines, este calibre constituye la encarnación contemporánea de una indiscutible maestría del cronometraje mecánico, de la que la marca del reloj de arena alado es heredera.
Longines empieza la producción de sistemas de cronometraje en 1878, con la realización de un cronógrafo simple de 20 líneas, referenciado 20H y equipado con una rueda de pilares que controla el mecanismo de cronógrafo. Casi todos los dispositivos de medida del tiempo elaborados por la marca del reloj de arena alado tras su incursión en el ámbito del cronometraje se benefician de este principio de concepción. Así, tanto los calibres para cronógrafos de bolsillo elaborados por Longines, tales como el 19CH (1889), los 19.73 (1897), 19.73N (1909) y 19.73N ratrapante (1922), el 18.72 (1929) o el calibre 24 líneas destinado específicamente al cronometraje deportivo (1939), como los movimientos para cronógrafos de pulsera de la casa relojera, tales como el 13.33Z (1913), el célebre 13ZN (1946) o el 30CH (1947), recurren a sistemas de rueda de pilares para controlar y accionar las funciones –diferentes según los calibres– de los mecanismos de cronógrafos.
Este conjunto de equipos de medida del tiempo compone el fundamento del compromiso histórico de la casa Longines con el cronometraje y el mundo del deporte. En consecuencia, el cronógrafo mecánico dotado de una rueda de pilares desempeña el papel, en la casa Longines, de dispositivo técnico tradicional y auténtico. Los relojes The Longines Column-Wheel Chronograph son la proyección de esta herencia relojera en el siglo XXI, con las tecnologías más recientes.
Provisto de 27 rubíes, el movimiento L688.2 es un calibre de carga automática de 30 mm de diámetro por 7,90 mm de altura. La rueda de pilares, con la que viene equipado, sirve para el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero). Este sistema, y en particular la rueda de pilares que ha sido estudiada por los ingenieros de la empresa ETA, ofrece una comodidad de utilización excepcional por un cronógrafo mecánico, haciendo que el arranque, la parada y la puesta a cero sean extremadamente suaves.
Alrededor de esta rueda de acero azulado, surge una estética impresionante del movimiento que lleva a una reactualización estilizada de un sistema técnico tradicional. Más allá de su diseño refinado, el calibre L688.2 revela además una construcción estudiada para responder a las exigencias de la cronometría. A estas alturas, Longines ha imaginado varios relojes para rendir homenaje a este movimiento de alta tecnología. Estos atributos de instrumento de medida del tiempo asociados con la reinterpretación de un diseño elegante, clásico o deportivo, hacen que los The Longines Column-Wheel Chronograph sean relojes contemporáneos, fieles a la gran tradición del cronometraje mecánico.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.733/749.4.52/72.x / L2.733.8.72.x)
Para un primer reloj The Longines Column-Wheel Chronograph otorga la primacía a una estética clásica y refinada. Acogiendo el calibre L688.2 en una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro, este cronógrafo indica la hora mediante agujas tipo dauphines rodiadas o rosas que recorren una esfera plateada o negra provista de 13 índices. Con una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas, este reloj, presentado con una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro, aloja un movimiento cuya rueda de pilares se revela a través de un fondo transparente de zafiro.
The Longines Column-Wheel Chronograph (L2.742/750.4.56/76.x / L2.742.8.76.x)
Para el segundo reloj The Longines Column-Wheel Chronograph, Longines ha privilegiado las formas clásicas y elegantes que evocan los relojes que contribuyeron a su éxito en el transcurso del siglo XX. Ese reloj dispone de una caja de acero inoxidable o de oro rosa de 39 mm de diámetro para alojar el calibre L688.2, cuyos latidos íntimos se desvelan a través de un fondo transparente de zafiro. Dotado de agujas tipo “dauphines” rosas, mediando el paso del tiempo en una esfera plateada o negra adornada con 8 índices, The Longines Column-Wheel Chronograph ostenta una ventanilla de fecha, un pequeño segundero a las 9 horas, un contador de arrastre de 30 minutos a las 3 horas y un contador de arrastre de 12 horas a las 6 horas. Una correa de auténtica piel de aligátor de color marrón o negro complementa este cronógrafo de pulsera de última tecnología.
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines se beneficia de más de 175 años ininterrumpidos de maestría relojera así como de una solida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Especificaciones técnicas calibres Longines:
http://www.longines.es/documents/technical-information/mechanical-movements-en.pdf
