Teo
New member
Cómo resumir...
...un día increíble.
Era mi segunda visita al Centro Relojero, pero la primera a una quedada. Aunque venía mi mujer conmigo, no dejaba de estar nervioso. Iba a un sitio en el que no conocía a nadie en persona, aunque sí por los nicks. Cuando estaba recogiendo el Candino, me temblaban las manos, sin exagerar. Luego las personas fueron asociandose con los nicks y ya pasamos a acortar el armis. Muchas gracias a Áncora por su paciencia:guay::guay: Cuando dejé el sitio para que otro se pusiera a trabajar curioseé el taller de Pedro. Me pareció increible el orden, la limpieza, y las máquinas con las que trabaja. Lo siento, me gustan las máquinas y no pude más que maravillarme con las que vi. Después de acordarme por segunda vez de Gallardón y sus parquímetros (1 hora, 1,80€, qué robo:grrrrrr::grrrrrr Tuvimos la oportunidad de conocer a Miguel Rodríguez. Por no repetir todo lo que se ha dicho aquí, simplemente diré que me pareció la antítesis del nuevo rico que tanto abunda por ahí. Una persona que me imagino que podrá elegir entre mil opciones a cuál más chic para pasar un sábado, decidió pasarlo con unos locos de los relojes que todos juntos no supondremos más allá de la milmillonésima parte de su facturación anual. Chapeau y muchas gracias por todo!
Después de charlar con varios de estos nuevos amigos tuvimos que marcharnos sin poder quedarnos a comer con vosotros. Me habría gustado aprender en esa mesa, pero seguro que conforme vaya pasando el tiempo y los recuerdos se acumulen en este hilo, será como si hubiese estado.
En fin, que menudo rollo estoy metiendo, pero es difícil que en un sólo día tantas sensaciones se asimilen y desde luego la experiencia del sábado supuso un antes y un después para mi. ¿Cuándo es la próxima?:yes::yes:
...un día increíble.
Era mi segunda visita al Centro Relojero, pero la primera a una quedada. Aunque venía mi mujer conmigo, no dejaba de estar nervioso. Iba a un sitio en el que no conocía a nadie en persona, aunque sí por los nicks. Cuando estaba recogiendo el Candino, me temblaban las manos, sin exagerar. Luego las personas fueron asociandose con los nicks y ya pasamos a acortar el armis. Muchas gracias a Áncora por su paciencia:guay::guay: Cuando dejé el sitio para que otro se pusiera a trabajar curioseé el taller de Pedro. Me pareció increible el orden, la limpieza, y las máquinas con las que trabaja. Lo siento, me gustan las máquinas y no pude más que maravillarme con las que vi. Después de acordarme por segunda vez de Gallardón y sus parquímetros (1 hora, 1,80€, qué robo:grrrrrr::grrrrrr Tuvimos la oportunidad de conocer a Miguel Rodríguez. Por no repetir todo lo que se ha dicho aquí, simplemente diré que me pareció la antítesis del nuevo rico que tanto abunda por ahí. Una persona que me imagino que podrá elegir entre mil opciones a cuál más chic para pasar un sábado, decidió pasarlo con unos locos de los relojes que todos juntos no supondremos más allá de la milmillonésima parte de su facturación anual. Chapeau y muchas gracias por todo!
Después de charlar con varios de estos nuevos amigos tuvimos que marcharnos sin poder quedarnos a comer con vosotros. Me habría gustado aprender en esa mesa, pero seguro que conforme vaya pasando el tiempo y los recuerdos se acumulen en este hilo, será como si hubiese estado.
En fin, que menudo rollo estoy metiendo, pero es difícil que en un sólo día tantas sensaciones se asimilen y desde luego la experiencia del sábado supuso un antes y un después para mi. ¿Cuándo es la próxima?:yes::yes: