Miguelanxo
Well-known member
Tenía este reloj pendiente de entrar en quirófano. La marca, Ryland, un "swiss made" con el conocido AS 1130 en la versión de 15 rubís dentro. Ya otras veces lo he argumentado: si lo que hay dentro es la misma máquina (AS, FH, KF, ETA, Felsa, etc...) lo que resulta diferencial es el exterior. Y esta esfera art-déco me pareció algo más que original. Podría aparecer sin problemas en la muñeca de algún personaje de "Metrópolis".
El plexi, además de muy rayado, estaba agrietado, la esfera tenía serios daños en los bordes de los resaltes metálicos, y unos extraños puntos negros a las 12, las 3 y las 9.
Los daños en la esfera eran mayores de lo que pensaba. Se pueden apreciar las cuatro capas: el gris metálico de la placa, una primera base blanca, las tampografías (negra y roja) y la laca de barniz final. Los puntos negros, la barra horizontal en las 6 y los trazos del resto de las horas resultaron ser marcas de luminova avejentada.
Retiré la luminova. Fijaos lo delicada que es la capa de laca que con el levísimo frotado con el que retiré la luminova se rayó. Se ve muy claramente en las 3.
A partir de ese momento fui aplicando capas muy finas de pigmento. Las primeras han de ser más cubrientes para ocultar la placa metálica de la esfera. Progresivamente han de tener cada vez más transparencia. El problema, para el que no hay receta y que solo la experiencia nos permite resolverlo, es que tenemos tres factores a igualar: el color, la reflexión metalizada de la mayoría de las esferas (dorados, cobrizos o plateados) y el brillo.
Paciencia y capas finísimas y muy transparentes para ir matizando los tres factores. Trabajé con pinceles del 0 y el 00 y pigmentos acrílicos (¡de bellas artes, no Titanlux! :guiño
. Otro asunto fundamental y de difícil "medición": el pigmento ha de tener una viscosidad determinada. Si es demasiado espeso, la pincelada se marcará e irán quedando irregularidades. Si está demasiado diluido, se formarán gotas y charquitos.
El trabajo acabado respeta el carácter que los 60 años de historia le han dado a la esfera y los adornos. Como ya he comentado en otras ocasiones (siento ser tan pelma) pulir la esfera y los metales, darle una nueva base, estampar de nuevo los textos y barnizar el conjunto, eliminando toda señal de esos 60 años de historia, sería "reconstruir", no "restaurar". Imaginad un cuadro; para recuperar su esplendor "original", en lugar de "restaurar" las partes dañadas, eliminaríamos todo hasta quedar únicamente con la tela de lino. Entonces, imprimaríamos de nuevo la tela con una imprimación moderna y le encargaríamos a un copista (buenísimo) que ejecutase una copia lo más fiel posible al original. En fin, hablamos de relojes, no de las Meninas, y habrá múltiples ocasiones en las que la restauración no tendrá sentido (por precio o dificultad) y la mejor opción será la reconstrucción.
Cambiado el plexi, este es el resultado final:
Los foreros ya sabemos lo que supone la macro fotografía. Así es como se puede ver a simple vista.
Espero que no os haya resultado tedioso.
Saludos

El plexi, además de muy rayado, estaba agrietado, la esfera tenía serios daños en los bordes de los resaltes metálicos, y unos extraños puntos negros a las 12, las 3 y las 9.

Los daños en la esfera eran mayores de lo que pensaba. Se pueden apreciar las cuatro capas: el gris metálico de la placa, una primera base blanca, las tampografías (negra y roja) y la laca de barniz final. Los puntos negros, la barra horizontal en las 6 y los trazos del resto de las horas resultaron ser marcas de luminova avejentada.

Retiré la luminova. Fijaos lo delicada que es la capa de laca que con el levísimo frotado con el que retiré la luminova se rayó. Se ve muy claramente en las 3.

A partir de ese momento fui aplicando capas muy finas de pigmento. Las primeras han de ser más cubrientes para ocultar la placa metálica de la esfera. Progresivamente han de tener cada vez más transparencia. El problema, para el que no hay receta y que solo la experiencia nos permite resolverlo, es que tenemos tres factores a igualar: el color, la reflexión metalizada de la mayoría de las esferas (dorados, cobrizos o plateados) y el brillo.

Paciencia y capas finísimas y muy transparentes para ir matizando los tres factores. Trabajé con pinceles del 0 y el 00 y pigmentos acrílicos (¡de bellas artes, no Titanlux! :guiño

El trabajo acabado respeta el carácter que los 60 años de historia le han dado a la esfera y los adornos. Como ya he comentado en otras ocasiones (siento ser tan pelma) pulir la esfera y los metales, darle una nueva base, estampar de nuevo los textos y barnizar el conjunto, eliminando toda señal de esos 60 años de historia, sería "reconstruir", no "restaurar". Imaginad un cuadro; para recuperar su esplendor "original", en lugar de "restaurar" las partes dañadas, eliminaríamos todo hasta quedar únicamente con la tela de lino. Entonces, imprimaríamos de nuevo la tela con una imprimación moderna y le encargaríamos a un copista (buenísimo) que ejecutase una copia lo más fiel posible al original. En fin, hablamos de relojes, no de las Meninas, y habrá múltiples ocasiones en las que la restauración no tendrá sentido (por precio o dificultad) y la mejor opción será la reconstrucción.
Cambiado el plexi, este es el resultado final:

Los foreros ya sabemos lo que supone la macro fotografía. Así es como se puede ver a simple vista.

Espero que no os haya resultado tedioso.
Saludos
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