PedroA
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Después de reparar el Longines de mi abuelo paterno (motivo por el que hoy ando con los relojes) no he parado de buscar el de mi abuelo materno. De niño siempre lo veía sacarlo del chaleco para consultar la hora, pero era demasiado pequeño para tener interés por estas cosas. Fallecida mi madre, mi abuelo se marchó y con él el reloj. Tras averiguar en donde estaba, confié en que estuviera en un cajón muerto de asco, más posibilidades para recuperarlo, pero no ha sido asi. Os dejo una fotografía que me han enviado. Una lástima porque me parece precioso y me trae muy buenos recuerdos.
Saludos.
Saludos.
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