fquiroga
New member
hola, soy el sofa del quiroga, nadie hubiera reparado en mi, ni yo mismo, soy facil de olvidar y de dar por sentado (nunca mejor dicho) naci en italia un dia que trajeron una piel de bufalo y por esas casualidades, fui a para a una tienda de muebles
la mujer del quiro, lalolacatalana, fue un dia a vernos a otros compañeros y a mi porque el quiro cumplia 50 años, hace tiempo de esto, nadie habia mirado con atencion que no tengo ornamentos de ningun tipo, que soy de piel y que no hago sudar en verano, un poco frio, eso si, en invierno, sobre todos al principio de ocuparme, luego se caldea la cosa
soy rojizo, color tierra arcillosa mas bien, como estas tierras catalanas que nos circundan, desde mi ventana veo la mola de sabadell, una montaña sagrada que parece magica, y desde mi sitio se ven tierras arcillosas convertidas en terrasas para el cultivo
tengo unos brazos suficientemente altos para que no se necesite almohada, el quiro se estira horas enteras encima de mi, mirando sus relojes y escribiendo, a veces aparece hipnotizado con un modelo concreto y no se le oye casi un suspiro, abstraido por la forma del artilugio que lo subyuga
la mirada se pierde en el espacio imaginando los contornos de miles de relojes circunscritos a su memoria de la escultura, el conjunto, el fondo y las agujas, el contorno fantasioso de un reloj imaginario, nace una musica tenue de la imagen sonora del reloj
a veces mi cuerpo de sofa arropa a la hija del quiro, anna, los ojos en los ojos del espacio y el silencio de una adolescente, rotunda, clara, calmada, anna mira peliculas de los hermanos cohen, de polanski, algunas de terror, pulp fiction la fascina con su violencia asumida, asimilada, inscrita
a veces se sienta la lolacatalana, se estira, se abriga, se refugia, en la concava alma del sofa que la circunda como un cofre, pequeña, ligera, a veces cansada y a veces perezosa, en el corazon de esta familia me siento como una casa dentro de la casa
pero el mejor momento, el sumun, es cuando el quiro estrena un reloj, la casa se llena de pasos, viajes, retornos y sorpresas, delante de mi en la mesa se coloca una maleta plateada llena de correas, armis, natos, herramientas, pinzas, navajas, aires de una fiesta que continua horas probando unas otras y otros, mirando con el aire la familia de las formas y contornos
la mujer del quiro, lalolacatalana, fue un dia a vernos a otros compañeros y a mi porque el quiro cumplia 50 años, hace tiempo de esto, nadie habia mirado con atencion que no tengo ornamentos de ningun tipo, que soy de piel y que no hago sudar en verano, un poco frio, eso si, en invierno, sobre todos al principio de ocuparme, luego se caldea la cosa
soy rojizo, color tierra arcillosa mas bien, como estas tierras catalanas que nos circundan, desde mi ventana veo la mola de sabadell, una montaña sagrada que parece magica, y desde mi sitio se ven tierras arcillosas convertidas en terrasas para el cultivo
tengo unos brazos suficientemente altos para que no se necesite almohada, el quiro se estira horas enteras encima de mi, mirando sus relojes y escribiendo, a veces aparece hipnotizado con un modelo concreto y no se le oye casi un suspiro, abstraido por la forma del artilugio que lo subyuga
la mirada se pierde en el espacio imaginando los contornos de miles de relojes circunscritos a su memoria de la escultura, el conjunto, el fondo y las agujas, el contorno fantasioso de un reloj imaginario, nace una musica tenue de la imagen sonora del reloj
a veces mi cuerpo de sofa arropa a la hija del quiro, anna, los ojos en los ojos del espacio y el silencio de una adolescente, rotunda, clara, calmada, anna mira peliculas de los hermanos cohen, de polanski, algunas de terror, pulp fiction la fascina con su violencia asumida, asimilada, inscrita
a veces se sienta la lolacatalana, se estira, se abriga, se refugia, en la concava alma del sofa que la circunda como un cofre, pequeña, ligera, a veces cansada y a veces perezosa, en el corazon de esta familia me siento como una casa dentro de la casa
pero el mejor momento, el sumun, es cuando el quiro estrena un reloj, la casa se llena de pasos, viajes, retornos y sorpresas, delante de mi en la mesa se coloca una maleta plateada llena de correas, armis, natos, herramientas, pinzas, navajas, aires de una fiesta que continua horas probando unas otras y otros, mirando con el aire la familia de las formas y contornos