Muchas de las advertencias no son tan "estúpidas" como parecen. Hay países (alguno de ellos lo tenemos "in mente") en los que se demanda a las empresas fabricantes de cualquier producto a la más mínina ocasión que se presente (incluso, exagerando, en cada esquina hay un abogado esperando que alguien resbale en la acera, para demandar al ayuntamiento). Esto lo hacen las empresas para "curarse en salud", ni más ni menos. En alguna ocasión leí que algún fabricante de microondas ponía en sus instrucciones que su máquina no servía para secar a las mascotas después de bañarlas, por ejemplo.