Bilhana
New member
Hace unos meses vi, puesto en una muñeca, un Omega Constellation con una esfera «Pie Pan», y,... me enamoré, tenía claro que iba a tener uno, pero lo bueno en estos casos no es buscar el reloj, es dejar que él te encuentre...
El primero que me encontró estaba en un escaparate madrileño, pero con una etiqueta de 4 cifras colgando... Me encontró otro a mucho mejor precio en el foro compra venta, pero todavía fuera de mi alcance,...
Supongo que mi subconsciente seguía esperando el «Pie Pan», no se si pensaba en él cuando alguien me ofreció como compensación a un cambio un calibre de cronometro certificado Omega 561, este:
Siempre le agradeceré a Germán que me lo ofreciera, sin tan siquiera saber él que yo quería el «Pie Pan», y sin imaginar yo que podía empezar a materializar mis deseos a partir de ese 561
Cuando lo tuve en mis manos dediqué unos ratos a buscar información sobre el movimiento diseñado por Marc Colomb, y, confirmando mi convicción de que es el reloj el que debe de encontrate a ti, vi claramente que lo que había llegado a mis manos era el corazón de mi futuro Omega «Pie Pan».
Así que me pusé a buscar el cuerpo, la cara, las manos,... porque claro, no sólo de movimiento vive el adicto a los relojes.
La primera decepción viene cuando en Otto Frei supe no sólo que la esfera que buscaba está agotada, es que ni tan siquiera saben si van a tener en el futuro «SOLD OUT, NOT SURE IF WE CAN GET MORE» leo bajo la imagen de la esfera del reloj de mis sueños.
Luego, descubrí en algún foro en los que quemé las pestañas buscando información, que Omega sólo sirve esferas «Pie Pan» si le mandas la vieja, o el logo de una esfera vieja,... páginas y más páginas, mira que algunos tienen esferas, como el australiano este.
Insistí en todas partes hasta dar con Phong. Resulta que Phong, allá en Scottsdale, Arizona, tiene esferas, cajas lo que podáis llegar a desear de y/o para las grandes marcas, y además personaliza todo tipo de relojes,... vamos la casita de caramelo, y os aseguro que el tal Phong no es una bruja, ya lo veréis, ya.
Recuerdo que era domingo, pero me contestó enseguida el correo que le mandé preguntado si tenía caja, esfera y agujas para mi 561. Lo que pasa es que me contestó que debía mirarlo, porque no recordaba que le quedara ninguno...
Pasaron algunos días hasta que Phong me dijo que si, que tenía casi todo lo que necesitaba, además, el precio era razonable, algo más de 300 euros; así que, el 26 de agosto salieron de Scottsdale, Arizona, el cuerpo, los brazos y la cara de mi ya casi tangible «Pie Pan».
El paquete, como suele ocurrir, llegó mientras yo andaba por ahí, y hasta hoy no he podido abrirlo. Phong me decía que era su último set para 561, lo cual me hacía sentir especialmente afortunado,...
en el interior de la caja el paquetito de las agujas, curioso pero práctico contenedor
No me he fijado en otra cosa que me decía Phong, porque ya estaba sacando de su bolsa la caja para comprobar que todo estaba en orden, su fondo con el observatorio de Neuchâtel...
Los reflejos son culpa del plástico protector, que no voy a sacar hasta poder estrenar el reloj.
Su corona con la última letra del alfabeto...
Y, al abrir la segunda bolsa, entiendo lo que había visto en la nota, «last one I have with 2 dial...» Phong me había puesto, además de la esfera blanca que le había pedido, ¡¡una preciosa esfera negra «Pie Pan» gratis!!.
No se trata sólo del valor material de la esfera, que es considerable, se trata de lo difícil que resulta encontrar una de esas codiciadas tarteras, de tener dos relojes en uno, del detallazo,... que os voy a contar...
También viene de camino una hebilla original, y sólo me falta un disco de fechas en blanco y otro en negro, para poder tomar una de las decisiones más difíciles,... ¿«Pie Pan» blanco o negro? Claro que,... la opción de mantener el disco original dorado para la esfera negra con índices dorados... mmmmm,... tal vez, tal vez... se admiten sugerencias...
¡Ah! Soy plenamente consciente de que estoy haciendo un Franken, que no va a ser un Constellation original, porque es fruto del ensamblaje de piezas de diversas procedencias, pero a mis ojos eso no será especialmente relevante...
El primero que me encontró estaba en un escaparate madrileño, pero con una etiqueta de 4 cifras colgando... Me encontró otro a mucho mejor precio en el foro compra venta, pero todavía fuera de mi alcance,...
Supongo que mi subconsciente seguía esperando el «Pie Pan», no se si pensaba en él cuando alguien me ofreció como compensación a un cambio un calibre de cronometro certificado Omega 561, este:
Siempre le agradeceré a Germán que me lo ofreciera, sin tan siquiera saber él que yo quería el «Pie Pan», y sin imaginar yo que podía empezar a materializar mis deseos a partir de ese 561
Cuando lo tuve en mis manos dediqué unos ratos a buscar información sobre el movimiento diseñado por Marc Colomb, y, confirmando mi convicción de que es el reloj el que debe de encontrate a ti, vi claramente que lo que había llegado a mis manos era el corazón de mi futuro Omega «Pie Pan».
Así que me pusé a buscar el cuerpo, la cara, las manos,... porque claro, no sólo de movimiento vive el adicto a los relojes.
La primera decepción viene cuando en Otto Frei supe no sólo que la esfera que buscaba está agotada, es que ni tan siquiera saben si van a tener en el futuro «SOLD OUT, NOT SURE IF WE CAN GET MORE» leo bajo la imagen de la esfera del reloj de mis sueños.
Luego, descubrí en algún foro en los que quemé las pestañas buscando información, que Omega sólo sirve esferas «Pie Pan» si le mandas la vieja, o el logo de una esfera vieja,... páginas y más páginas, mira que algunos tienen esferas, como el australiano este.
Insistí en todas partes hasta dar con Phong. Resulta que Phong, allá en Scottsdale, Arizona, tiene esferas, cajas lo que podáis llegar a desear de y/o para las grandes marcas, y además personaliza todo tipo de relojes,... vamos la casita de caramelo, y os aseguro que el tal Phong no es una bruja, ya lo veréis, ya.
Recuerdo que era domingo, pero me contestó enseguida el correo que le mandé preguntado si tenía caja, esfera y agujas para mi 561. Lo que pasa es que me contestó que debía mirarlo, porque no recordaba que le quedara ninguno...
Pasaron algunos días hasta que Phong me dijo que si, que tenía casi todo lo que necesitaba, además, el precio era razonable, algo más de 300 euros; así que, el 26 de agosto salieron de Scottsdale, Arizona, el cuerpo, los brazos y la cara de mi ya casi tangible «Pie Pan».
El paquete, como suele ocurrir, llegó mientras yo andaba por ahí, y hasta hoy no he podido abrirlo. Phong me decía que era su último set para 561, lo cual me hacía sentir especialmente afortunado,...
en el interior de la caja el paquetito de las agujas, curioso pero práctico contenedor
No me he fijado en otra cosa que me decía Phong, porque ya estaba sacando de su bolsa la caja para comprobar que todo estaba en orden, su fondo con el observatorio de Neuchâtel...
Los reflejos son culpa del plástico protector, que no voy a sacar hasta poder estrenar el reloj.
Su corona con la última letra del alfabeto...
Y, al abrir la segunda bolsa, entiendo lo que había visto en la nota, «last one I have with 2 dial...» Phong me había puesto, además de la esfera blanca que le había pedido, ¡¡una preciosa esfera negra «Pie Pan» gratis!!.
No se trata sólo del valor material de la esfera, que es considerable, se trata de lo difícil que resulta encontrar una de esas codiciadas tarteras, de tener dos relojes en uno, del detallazo,... que os voy a contar...
También viene de camino una hebilla original, y sólo me falta un disco de fechas en blanco y otro en negro, para poder tomar una de las decisiones más difíciles,... ¿«Pie Pan» blanco o negro? Claro que,... la opción de mantener el disco original dorado para la esfera negra con índices dorados... mmmmm,... tal vez, tal vez... se admiten sugerencias...
¡Ah! Soy plenamente consciente de que estoy haciendo un Franken, que no va a ser un Constellation original, porque es fruto del ensamblaje de piezas de diversas procedencias, pero a mis ojos eso no será especialmente relevante...