Nada de nada nada.
No hay posibilidad de elección ya que casi todo es marca Hacendado - muy floja- y en lo demás, incluído productos frescos, la calidad es muy baja.
Había algo que me gustaba, la cinta dental - buena bonita barata- y ya la han jorobado: ahora se rompe con mirarla.
El Corte Inglés es la única gran superficie que me parece aceptable , nada más que eso, aunque lo pagas, vaya que si lo pagas. Y eso que se les nota la crisis.
Porque la verdad es como mi frutero, mi amadísima pescadera - un día me soltó delante de todo el personal que ella a mi me hacía todo lo que yo lo pidiera y os confieso que no soy el mismo desde entonces- y a mi no menos amada carnicera, todos ellos del mercado de Ruzafa, no hay nada en el mundo mundial. Y si se atrevieran algún día a clavármela doblada, ya saben seguro lo que van a comer al día siguiente.
Además, cuando que me ven me cuentan su vida, cosa que, a veces, no tiene precio.
Aunque otras, sí.