Miguelanxo
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Esta era la otra restauración reciente que tenía pendiente de mostrar. Se trata de un Cauny, probablemente de los 50, con movimiento ETA 810 y pasadores fijos La esfera estaba muy deteriorada, la caja y el bisel tenían el cromado muy desgastado y la corona había sido reemplazada por una dorada. Decidí una restauración parcial, similar a la del Dogma anterior, preservando el aro exterior dorado del dial con la escala minutera, que se mantenía razonablemente bien.
Desmontada la esfera, la superficie estaba tan tocada que era imposible limpiar la laca de la capa exterior sin afectar a la capa de color que tamizaba el metal de la superficie. El VI, el X y el "antimagnetic" estaban deteriorados, y el VIII y el XII tenían pequeñas faltas. La marca también resultó dañada en la limpieza. Decidí, por tanto, restaurar toda la esfera central.
Tras una primera capa de imprimación aerografié un acabado nacarado, esta vez más plateado que dorado y con algo más de brillo que en el Dogma.
Al rediseñar la esfera decidí alterar algunos elementos. Los puntos de las horas impares los hice rojos y la tipografía romana original, simple y bastante ancha, la substituí por otra más estrecha y con palos de dos grosores, lo que me pareció que la hacía algo más elegante.
Y así quedó una vez impresa.
En esta ampliación (mejor enfocada que la del Dogma) puede apreciarse mejor el efecto del nacarado.
La esfera montada. a la espera de hacer el niquelado de caja y bisel.
El latón, una vez descromado, aunque no muy dorado, era de buena calidad.
Tras el cobreado.
Y ya niquelados.
Y este es el resultado final, con la corona ya substituida.
Espero no haber aburrido.
¡Saludos!
Desmontada la esfera, la superficie estaba tan tocada que era imposible limpiar la laca de la capa exterior sin afectar a la capa de color que tamizaba el metal de la superficie. El VI, el X y el "antimagnetic" estaban deteriorados, y el VIII y el XII tenían pequeñas faltas. La marca también resultó dañada en la limpieza. Decidí, por tanto, restaurar toda la esfera central.
Tras una primera capa de imprimación aerografié un acabado nacarado, esta vez más plateado que dorado y con algo más de brillo que en el Dogma.
Al rediseñar la esfera decidí alterar algunos elementos. Los puntos de las horas impares los hice rojos y la tipografía romana original, simple y bastante ancha, la substituí por otra más estrecha y con palos de dos grosores, lo que me pareció que la hacía algo más elegante.
Y así quedó una vez impresa.
En esta ampliación (mejor enfocada que la del Dogma) puede apreciarse mejor el efecto del nacarado.
La esfera montada. a la espera de hacer el niquelado de caja y bisel.
El latón, una vez descromado, aunque no muy dorado, era de buena calidad.
Tras el cobreado.
Y ya niquelados.
Y este es el resultado final, con la corona ya substituida.
Espero no haber aburrido.
¡Saludos!
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